A ganar todos los encuentros contra equipos directos y contra la FVF

Pasadas ya más de 24 horas la sensación sigue siendo la misma, en cualquier rincón de Mérida, se escuchan los comentarios “Nos robaron la copa” o “¿hasta cuándo esta federación?”, y son sólo algunas expresiones derivadas de la actuación de los jueces que tenían la responsabilidad de dirigir una final, no era cualquier cosa, era la final de la Copa Venezuela.

Se cobró un penal que no lo fue y el que fue no se cobró, aún cuando las pasiones lleven a análisis tan cortos, hay que reconocer el fallo arbitral, sí se es rígido en una sentencia también se debe ser rígido en todas, pero sensato no es precisamente un adjetivo para acuñársele al arbitraje venezolano, así que olvidémonos de el error (que le costó a Estudiantes su 3cera copa) que en lo que sí son eficientes en la federación es al momento de dictar sanciones y al “Metro” les esperan varios fallos en contra.

Cuando apenas Estudiantes logra entender que se perdió una titulo, la opción de ir a un torneo internacional, recibir un aproximado de 120 mil dólares, el poder demostrar con hechos el trabajo desempeñado por el cuerpo técnico, en ese instante aparece el fantasma ultra conocido: “El Descenso”, al que se ha eludido en los últimos años, pero que en esta temporada ya no es una sólo posibilidad sino que desde la próxima jornada empezará a convivir dentro del equipo, y tocará remar fuerte contra muchos obstáculos que serán más fuertes incluso que los que se presentaron en la final ante el DANZ.